Si hay algo inevitable en esta vida es que el tiempo sigue su curso sin importarle nada y en su oleaje nos lleva a cada uno de nosotros. Todos envejecemos, es parte de la vida, biología y naturaleza. Con el paso de los años, las células se vuelven más ineficientes y menos activas, por ello la fisiología o funcionamiento del cuerpo cambia. Hay tantos cambios que existe toda una rama de la medicina que estudia el envejecimiento y se llama geriatría. Algunos cambios se consideran fisiológicos, son cambios que le ocurren a casi todos y son normales, otros cambios son patológicos y se consideran una enfermedad; sea cual sea, el cuerpo cambia. El primero de octubre se celebra el Día Internacional de las Personas de Edad o Adultas Mayores (El 14 de diciembre de 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas, a través de la resolución 45/106, designó el 1 de octubre Día Internacional de las Personas de Edad) y para celebrarlo veamos 30 cambios y datos curiosos que ocurren con el envejecimiento.
En nuestros cromosomas existen unas proteínas que se llaman telómeros. Los telómeros se van acortando con cada división celular y cuando llegan a ser muy cortos la célula muere. Esto es la senescencia celular.
Al telómero se le llama también reloj biológico o el reloj de la vida de un organismo. El límite del telómero se conoce como límite de Hayflick y es cuando una célula ya no se puede volver a dividir.
No todos tienen telómeros iguales. En estudios animales, aquellos que tienen telómeros más largos son más longevos. En humanos aún no es del todo claro. Diferentes estudios han visto diferentes cosas. En algunos, la gente con telómeros más largos llega a ser más longeva, y en otros, pareciera no importar demasiado.
Puedes acortar tus telómeros tú mismo si no los cuidas. Fumar, la obesidad, el estrés, la contaminación, no usar bloqueador solar, no comer frutas y verduras y no ejercitarse causan acortamiento del telómero. Sin embargo, las acciones contrarias lo mantienen más largo por más tiempo.
Existe una enzima llamada telomerasa que forma más telómeros, pero por lo general se activa en células cancerígenas y las vuelve inmortales.
Los telómeros son las partes más oscuras. Su acortamiento genera envejecimiento celular.
Existe una pequeña paradoja con la edad y el cáncer. El cáncer es más común mientras más se envejece, pero es menos común en los más viejos. La prevalencia de cáncer aumenta conforme se llega a los 70 años, pero baja a partir de ahí. Alguien que llega a los 90 años casi nunca muere de cáncer.
Los cánceres más comunes en la vejez son el de próstata, pulmón, mama y colorrectal.
Presbiacusia es la palabra para definir la pérdida del oído en las personas mayores.
La presbiacusia ocurre por la pérdida de unos vellitos en las células de la cóclea. La cóclea es un órgano en forma de caracol en el oído. Con la edad se pierden las células más cercanas a la entrada del sonido, las cuales son las encargadas de escuchar las altas frecuencias, por ello los sonidos agudos se dejan de percibir.
Parecido a la presbiacusia, existe la presbicia, que es la dificultad de ver cosas de cerca en las personas mayores.
La cóclea es el órgano que parece caracol y se ve azul. Al inicio del caracol están las células que detectan sonidos agudos y al final, más adentro, las que detectan sonidos graves.
La presbicia no se sabe por qué ocurre, existen varias teorías, pero la mayoría concuerda en que el músculo ciliar, el músculo encargado de mover el cristalino, que es el lente del ojo, ya no logra hacer bien su tarea.
Aunque menos conocidos, y tal vez el médico ni identifique los términos, presbiosmia y presbiguesia son otros problemas con los sentidos del olfato y el gusto respectivamente, en donde se pierde cierta capacidad sensorial.
El órgano que más se intenta proteger del envejecimiento es la piel. Existen miles de productos para el cuidado de la piel y mantenerla joven, pero eso en la fisiología no es del todo posible.
La piel al envejecer deja de secretar sebo, por lo que pierde luminosidad e hidratación. También pierde melanocitos, las células que dan color a la piel, por lo que se va blanqueando de manera irregular. Se pierde el grosor de la dermis, la parte de la piel que en realidad da elasticidad y llenado. Finalmente, se pierde la unión epidermis-dermis por lo que la piel se arruga.
Los fibroblastos son las células que secretan colágeno, ácido hialurónico y elastina, componentes que mantienen a la piel joven y regordeta. Con el tiempo estas células mueren y dejan de secretar estas sustancias.
El protector solar ayuda a mantener joven la piel, ya que protege contra la radiación UV.
Untar colágeno o ácido hialurónico en la piel no sirve porque son moléculas muy grandes y polares, que la piel no absorbe.
Usar bloqueador solar sí que sirve y protege a la piel de envejecer porque bloquea el daño al ADN por la luz UV. Otras sustancias que ayudan son las vitaminas porque evitan el daño celular y facilitan la replicación celular.
La vitamina C es necesaria para formar colágeno, pero no la puedes untar en la piel porque es polar y no la traspasa , esa debes de comerla. La vitamina E si te la puedes untar en la piel porque es apolar y se absorbe en grasa, cosa que la piel tiene. La vitamina E ayuda a evitar la oxidación de las células.
Con el envejecimiento casi todas las hormonas del cuerpo bajan, excepto glucocorticoides (la hormona del estrés), las hormonas tiroideas y la hormona PTH (que regula el calcio).
Las mujeres pasan por la menopausia, donde deja de haber ciclos ovulatorios y las hormonas femeninas disminuyen. En los hombres existe el término andropausia y es algo debatido. Es verdad que los niveles de testosterona, la hormona masculina, bajan, pero suele mantenerse en el límite inferior normal, por lo que no existe la menopausia masculina.
La andropausia es la caída de la testosterona con la edad, pero algunos debaten que no existe tal condición.
La osteoporosis es una patología multifactorial, pero gran parte de la culpa la tienen las hormonas. La PTH en el envejecimiento aumenta y causa resorción ósea (desmineralizar el hueso) para sacar calcio a la sangre. Existe deficiencia de vitamina D, lo que causa que se absorba menos calcio de la dieta. Finalmente, desciende el estrógeno, que es una hormona que en el hueso genera que las células destructoras de hueso frenen y las productoras de hueso se activen. Es por el estrógeno que la osteoporosis es más problemática en mujeres.
La gente mayor siente menos hambre y come menos. Esto por un decremento en la hormona ghrelina, la cual causa hambre. También es por la menor motilidad del sistema digestivo, la comida se queda más tiempo en el estómago.
Los divertículos son una patología a la que muchas personas de la tercera edad se enfrentan. Ocurren por la baja motilidad del intestino, lo que en consecuencia causa que las heces se queden más tiempo en él. Las heces ejercen presión en la pared intestinal y causa que se hagan bolsitas.
Los divertículos o diverticulosis no son una emergencia médica, pero la diverticulitis sí lo es. La diferencia es que en la diverticulitis se inflama el divertículo y se puede romper.
Cuando llegamos a la tercera edad terminamos tomando muchos medicamentos, esto se llama polifarmacia. Es importante checarse continuamente el hígado porque es el órgano que los metaboliza y mucho medicamento lo puede dañar.
Varios cambios hormonales y mecánicos en el sistema digestivo causan que la gente mayor tenga menos hambre. Sin embargo, toda persona debe comer sano.
Existe la idea errónea de que en la antigüedad se respetaba más la vejez, que la edad simbolizaba sabiduría y traía respeto, pero la realidad es que la mejor época para ser viejo es ahora, con servicios de salud y servicios sociales.
Incluso hoy nos enfrentamos a ciertos problemas con la edad y no son siempre de salud sino sociales. La gerontofobia (temor morboso a los viejos o a envejecer), el edadísmo o viejismo (estereotipos y comportamientos prejuiciosos contra la población mayor a causa de su edad) son las formas de discriminación contra personas de la tercera edad.
Existe una paradoja histórica, donde la vejez es algo que la gente quiere lograr, pero no quiere llegar a ella, y donde la vejez se ve como algo respetable, pero también es despreciable socialmente hablando.
Los antiguos romanos y griegos veían a la vejez como algo peor que la muerte, porque era la causa del marchitar de grandes héroes.
Otto von Bismarck, el primer canciller alemán, fue el que inventó las pensiones públicas para la vejez en 1880. Su modelo fue tan revolucionario que casi toda Europa occidental lo copió. Hoy 100 países tienen un programa similar.
Estos son 30 datos respecto a la salud y a la edad. No son motivo de asustarse, al final todos vamos en esa dirección. Sin embargo, sirven para entendernos mejor y comprender mejor cómo es nuestro cuerpo y cómo éste cambia. Hay que cuidar al cuerpo y su salud desde edades tempranas para mantenerlo en el mejor estado posible, y durante la vejez, una se tiene que cuidar todavía más y ser diligente con su salud, porque el cuerpo simplemente se va volviendo menos hábil en su fisiología para poder disfrutar al máximo lo que traen los años dorados. Estos fueron 30 datos sobre la salud, la sociedad y los cambios que se tienen durante la vejez, como estos datos hay muchos más, después de todo existe toda una rama de la ciencia que estudia este tramo de la vida.
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